lunes, 7 de diciembre de 2009

Romerías



A lo largo del año se celebraban varias fiestas religiosas, destacando sobre todas la de SAN PELAYO (26 de junio), cuya romería se celebraba en los alrededores de la ermita del mismo nombre. Allí se congregaban los romeros procedentes de los pueblos del entorno (Cienfuegos, Cuevas, Las Llanas, Villar) y de otras parroquias, se celebraba una misa, se "sacaba" al Santo en procesión alrededor de la ermita, se subastaban los panes de escanda (la llamada "puya del ramu") y se merendaba y hacía baile al son de la gaita o del acordeón.
En caso de haber sequía, los feligreses de antaño pedían a San Pelayo que mandase lluvia: lo sacaban al camino y le echaban agua diciendo: "queremos esto". Curiosas costumbres que, como tantas otras, se perdieron con el paso del tiempo.
En el mes de junio se celebraban dos importantes fiestas, estas ya en el entorno de la iglesia de San Esteban: el CORPUS CHRISTI y SAN ANTONIO. En ambos casos se hacía procesión "paseando" la custodia o la imagen por el campo de la iglesia, para después dejar paso a la diversión de los bailes y cantos.
También los vecinos de Villar dedicaban un día a su patrona, SANTA TERESA DE JESÚS, haciendo una breve procesión desde la capilla hasta la "portilla" o entrada a la "cortina" (tierras de labor del pueblo), misa y verbena.
En el otoño se festejaba NUESTRA SEÑORA DEL ROSARIO, otra vez en la iglesia parroquial, quedando ya para el invierno las celebraciones de SAN ESTEBAN y de SANTA LUCÍA (la "abogada de la vista").
Todas las misas que se hacían en estas festividades se acompañaban del sonido de la gaita y en ocasiones de cánticos especiales para esa ocasión, recitados por algún vecino.

De todas estas fiestas únicamente se ha recuperado, desde hace unos pocos años, la de SAN PELAYO, pero limitada sólo a la Misa y procesión.

1 comentario:

Desde mi realidad dijo...

Las fiestas del peblo tienen algo especial... Yo nunca me las pierdo...